domingo, 31 de mayo de 2015

Autismo. Trastornos del espectro autista. C. P. ALBORAN

Fobia Social. Ansiedad Social. C.P. ALBORAN

Fobias Infantiles. Miedos infantiles. Centro de Psicología ALBORAN

Intervención Psicológica de la Depresión

Conductas suicidas. Prevenir e intervenir en Suicidio. Centro de Psicolo...

TOC. Trastorno Obsesivo Compulsivo. Centro de Psicología ALBORAN. Granad...

Centro Psicología ALBORAN

jueves, 7 de mayo de 2015

Trastorno de pánico. A.L. Maldonado. CP Alborán

TDAH. Hiperactividad y Déficit de Atención

Título de Psicoterapeuta de Conducta. AEPAP (Asociación Española para el Avance de la Psicología).



TITULO PSICOTERAPEUTA DE CONDUCTA
Acta de la Reunión de la Junta Directiva de la AEPAP (Asociación Española para el Avance de la Psicología), de fecha, 4 de Mayo de 2.015, por la que se constituye el Título de Psicoterapeuta de Conducta:

1.      Institución Emisora
AEPAP (Asociación Española para el Avance de la Psicología).

2.      Reconocimientos
La Acreditación como Psicoterapeuta de Conducta de la AEPAP cumple la mayoría de los requisitos para, posteriormente (si el solicitante lo desea), acreditarse en la FEAP (Federación Española de Asociaciones de Psicoterapeutas), Acreditación como Psicólogo Especialista en Psicoterapia (EUROPSY) y División de Psicoterapeutas del CGCOP (Consejo General de Colegios Oficiales de Psicólogos).

3.      Título que se emite
Psicoterapeuta de Conducta

4.      Capacitaciones

·         Evaluación de conductas problema y realización del Análisis Funcional
·         Aplicación de las Técnicas de Modificación de Conducta
·         Aplicación de Protocolos de Intervención en los principales problemas de comportamiento.
·         Ejercer la Psicoterapia desde el enfoque Conductual.

 5.      Requisitos obtención Título de Psicoterapeuta de Conducta

·         Título de Licenciado o Graduado en Psicología
·         Formación de Postgrado en Evaluación e Intervención en trastornos del comportamiento, de, al menos, 600 horas.
·         Formación Práctica supervisada con funciones de Psicoterapeuta, de al menos 500 horas.
·         Práctica profesional como Psicoterapeuta de Conducta con, al menos, 150 horas de supervisión.
·         Asistencia durante al menos seis meses a sesiones clínicas dirigidas por un Psicoterapeuta de Conducta.
·         Prueba de Acceso al Título: Será prueba teórico-práctica de 4 horas de duración.

6.      Renovaciones del Título de Psicoterapeuta de Conducta

·         El Título de Psicoterapeuta de Conducta de la AEPAP se concede por una duración de 2 años. El incumplimiento de los Criterios Específicos Provisionales dará lugar a una revisión y reevaluación de capacidades y habilidades cuya resolución podrá recaer en el sentido de mantener el Título hasta la siguiente renovación programada o retirar el Título de forma provisional o definitiva.
·         Las siguientes renovaciones se concederán por períodos de 5 años. Las renovaciones requieren la evaluación del curriculum del período anterior y la superación de la Prueba de Renovación de 4 horas de duración.

7.      Requisitos obligatorios para el mantenimiento del Título de Psicoterapeuta Conductual.

1.      Asistir, al menos, a una Jornada Anual de Psicoterapia Conductual.
2.      Publicación de casos sobre aplicación de la Psicoterapia Conductual durante el período entre renovaciones de Título. 3 casos para la primera Renovación Bianual y 10 casos para las Renovaciones Quinquenales.
3.      Cumplir los Protocolos de Intervención en los diferentes Problemas del Comportamiento.
4.      Cumplir los Criterios Éticos del Psicoterapeuta Conductual.
5.      Abonar la cuota anual de la AEPAP. División de Psicoterapeutas de Conducta.
6.      Participar en la Asamblea Nacional de la AEPAP, de carácter anual, salvo justificación.
7.      Consultar siempre cualquier duda relevante sobre la intervención con un cliente a la Comisión Nacional de Psicoterapia Conductual.

8.Justificación del Título de Psicoterapeuta Conductual de la AEPAP.
            La Psicoterapia en España tiene una larga trayectoria. Ni las vías de formación y acceso al Título de Psicoterapeuta, ni las funciones, ámbito de actuación y forma de trabajo de la Psicoterapia se encuentran todavía reguladas. Es decir, no existe un marco legislativo que regule el acceso al Título de Psicoterapeuta ni el ejercicio de esta profesión.
            Existen regulaciones privadas de acceso al Título de Psicoterapeuta como las de la FEAP o la División de Psicoterapeutas del Consejo General de Colegios Oficiales de Psicólogos. Estas regulaciones privadas establecen unos requisitos de acceso al Título de Psicoterapeuta.
            Entre las escuelas terapéuticas a las que se adscriben los distintos Psicoterapeutas y Asociaciones de Psicoterapeutas están la Psicoanalítica, Gestalt, Sistémica, Cognitiva, Humanista, etc.
            La AEPAP considera necesario proponer la Terapia de Conducta como la principal herramienta de trabajo de nuestros Psicoterapeutas. Siempre, sin cerrarnos a las aportaciones de otras escuelas, por su aportación de técnicas o por el estilo de relación terapéutica que proponen.
            Nuestro Título de Psicoterapeuta de Conducta se podrá utilizar como acreditación que permita ejercer la Terapia de Conducta con garantías de eficacia, ética y responsabilidad.
Los requisitos de nuestra acreditación de Psicoterapeuta de Conducta son compatibles con los de la FEAP,  la División de Psicoterapeutas del CGCOP y la de Psicólogo Especialista en Psicoterapia de Europsy. No obstante, estas Instituciones proponen algún requisito adicional que deberá cumplir el solicitante (ej. “2 años de práctica profesional como Psicoterapeuta, debidamente supervisada”, FEAP).

Atentamente,

Fdo. Antonio Luis Maldonado Cervera
Presidente AEPAP



lunes, 9 de marzo de 2015

Psicólogos, Especialistas en Psicología Clínica y Psicólogo General Sanitario

Introducción
La Psicología en España ha experimentado importantes avances en los últimos meses. Estos avances han sido fruto del afán regulador y legislativo del Gobierno actual, que ha intentado dar por solucionado el problema iniciado por las desdichadas acciones reguladoras de la Psicología llevadas a cabo durante las tres legislaturas anteriores (dos del PSOE y la anterior del Gobierno del PP, de la etapa de D. José María Aznar). En resumen, se han necesitado 4 períodos legislativos, 4 Presidentes del Gobierno, dos partidos políticos diferentes, Congresistas, Senadores, Consejeros, etc. para finalizar un entuerto legislativo que nace en 2.003 y entra en vigor el 6 de octubre de 2.014. ¿Cuál ha sido el resultado de tanto esfuerzo legislativo? ¿Se han resuelto los problemas que aquejaban a la Psicología? ¿Ha mejorado la atención psicológica de los españoles? Estos cambios legislativos ¿han mejorado o empeorado la Salud Pública, defendida por nuestra Constitución? Vamos a intentar reflexionar para dar respuesta a estas cuestiones. Por otro lado, vamos a contar cómo era la Psicología en España antes de estas Legislaciones y cómo es en la actualidad. Por último, vamos a dejar al descubierto los problemas reales de la Psicología en la actualidad y cuáles serían las soluciones necesarias.

Historia del entuerto legislativo sobre la Psicología
Hasta el 2.003, en nuestro país sólo existía un tipo de psicólogo. Para ejercer la profesión se necesitaba el Título de Licenciado en Psicología y estar Colegiado. Las funciones de todos los Psicólogos eran la evaluación o valoración de personas o grupos y la intervención psicológica en cualquiera de las Areas de Especialización de la Psicología. Ya se habían superado definiciones clásicas de la Psicología como la de Pinillos "el estudio del alma" y se entendía la Psicología como la Ciencia que estudia el Comportamiento Humano. A partir de esta definición es comprensible que la Psicología sea útil en todos los contextos de la vida en los que se manifiesta nuestro comportamiento. Así surgen las distintas Areas de Especialización de la Psicología: Psicología Clínica (intervención con personas que presentan trastornos psicológicos o comportamientos disfuncionales), Psicología de la Salud (intervención con personas que presentan enfermedades físicas en las que las causas son psicológicas o en su curación pueden ayudar técnicas de intervención psicológica como cáncer, asma, dolor crónico, lupus, etc.). La Psicología del Trabajo y las Organizaciones (selección de personal, formación e intervención sobre los comportamientos humanos en las organizaciones). La Psicología Escolar o de la Educación (evaluación e intervención psicológica en el entorno educativo). Estas, y otras Areas como la Psicología Jurídica o Forense, Psicología Social-Comunitaria, Psicología Básica, Neuropsicología, etc. realizaban sus funciones especializadas dentro de la Psicología.

Inicio del Problema: los psicólogos que trabajan en la Sanidad Pública quieren ser considerados "Sanitarios" y que se reconozca su "Especialidad"
Todo lo que voy a describir en este artículo surge de la demanda, en un principio lícita y justa, de una minoría de Psicólogos que trabajaban en la Sanidad Pública. Estos psicólogos querían ser "Sanitarios" y ostentar su propia "Especialidad". Personalmente, analizando la realidad, era y soy muy crítico respecto a algunas cuestiones relacionadas con los Psicólogos que trabajan en la Sanidad Pública. Sin embargo, la solución de sus problemas, a mi juicio, no consistía en que necesitaran poseer un Título de Especialista. Tener un Título proporcionará más o menos "autoestima" y reconocimiento social, pero no resuelve ni resolverá el problema de fondo que tenían y tienen estos Psicólogos. Y el problema viene de que no se han hecho respetar y valorar por sus compañeros de profesión, los Médicos y Psiquiatras. Y que han luchado mucho por ser considerados "Especialistas" y muy poco por llevar a cabo con eficacia sus intervenciones psicológicas. Me explico. Los Psicólogos que trabajan en la Seguridad Social, inicialmente aprueban una oposición con un temario teórico que no es más que un resumen de la Licenciatura o Grado. Luego son formados a cargo de Psiquiatras y/o de otros Psicólogos Especialistas que a su vez fueron formados por Psiquiatras. Lógicamente, un Psicólogo debe tener un Modelo Explicativo de la conducta humana ambientalista y sus técnicas de intervención se centran en modificar o entrenar comportamientos y ayudar a la persona a realizar los cambios necesarios en su entorno o ambiente. Es decir, que el Psicólogo parte de la idea de que los trastornos psicológicos se originan a partir de la experiencia de vida, de la historia personal de aprendizaje. Por tanto, la terapia consiste en ayudar a la persona a cambiar su conducta, es decir, su actividad observable, su forma de pensar y su respuesta emocional. Los Psiquiatras, en cambio, tienen un modelo explicativo de la conducta humana totalmente opuesto. La causa de los trastornos sería orgánica (disfunción en áreas del cerebro o en neurotransmisores) y el tratamiento se basaría en la administración de fármacos. El Psicólogo que trabaja en la Sanidad Pública suele hacerlo bajo las órdenes de los Psiquiatras, que son los que les dicen lo que pueden y no pueden hacer. Esto se refleja, en la práctica en el hecho de que un Psicólogo de la Sanidad Pública que trabaja en Salud Mental tenga que hacerse cargo de más de 300 casos, a los que podrá ver como mucho una vez al mes y durante no más de media hora. Lógicamente, con esa formación recibida, con esa limitación impuesta por sus "superiores" poca terapia psicológica se puede hacer. Por eso, entendería más que la lucha de los Psicólogos de la Sanidad Pública hubiera estado dirigida a recibir un formación por parte de Psicólogos Especializados, poder aplicar las técnicas eficaces de las que dispone nuestra disciplina y poder dedicar el tiempo necesario para tratar los casos con efectividad. Y por supuesto, no estar a las órdenes de nadie a la hora de diseñar y aplicar sus intervenciones. Pero no, su lucha fue porque se les reconociera su calidad de Sanitarios y se les diera el Título de Especialistas. Y este es el primer episodio del desastre al que se ha llevado a la Psicología en España. Lógicamente, consiguieron que se les reconociera como Sanitarios y se les concediera el Título de Psicólogos Especialistas en Psicología Clínica (no sin recursos y contra recursos iniciados por Asociaciones de Médicos, de Psiquiatras y otros Lobbys).

Respuesta y contraataque de los Lobbys Médicos, Psiquiatras, Laboratorios Farmacéuticos y otros grupos de presión interesados en fabricar, vender y administrar fármacos a la población Se puede decir que los Psicólogos de la Sanidad Pública le dieron el "golpe" a los Psiquiatras y demás grupos de interés, pero el contraataque, la "paliza" se dirigió a toda la Psicología en España. Ese fue el inicio del desastre. Lo que ocurrió fue que los Psicólogos que trabajaban en la Sanidad Pública consiguieron obtener el Título de Psicólogos Especialistas en Psicología Clínica, ser considerados "Profesionales Sanitarios" y poder realizar "Diagnósticos". Pero la contrapartida, la otra cara de la moneda, la cruz, consistió en un ataque sin precedentes a la Psicología en España. Se llegó al resultado de que el resto de Psicólogos, los que no tenían la Oposición del PIR, dejaron de poder realizar evaluaciones, tratamientos psicológicos ni diagnósticos. La Psicología pasó a no ser considerada una Profesión Sanitaria. Incluso, Psicólogos de toda España que tenían reconocidos esas funciones laborales porque eran a las que les habilitaba haber obtenido el Título de Licenciado en Psicología, incluso habiendo ejercido esas funciones durante años, perdieron esa facultad. Con una Ley que se aplicó con carácter retroactivo, miles de Psicólogos, licenciados a partir de diciembre de 1998 que realizaban las funciones de evaluación, diagnóstico y tratamiento psicológico, perdieron en 2003 dichas funciones. Ahora, según la Ley sólo podrían tratar los "fenómenos de la mente" y no los trastornos psicológicos. Pero claro, en la Facultad de Psicología habíamos estudiado: Psicopatología, Evaluación Psicológica, Psicodiagnóstico, Técnicas de Modificación de Conducta, etc. Llevábamos años aplicando lo que habíamos aprendido. Y ahora nos decían que no podíamos evaluar, diagnosticar ni tratar los problemas psicológicos. ¿Cómo puede un Psicólogo realizar ningún tipo de intervención si no puede realizar el diagnóstico? ¿Cómo diseñar un tratamiento sin un diagnóstico? Difícil tarea. Ni un coche puede arreglarlo un mecánico si no hace un "diagnóstico" de lo que le ocurre. Pero lo más grave no fue que no pudiéramos aplicar lo que habíamos aprendido en la Facultad. Lo más grave es que teníamos que intervenir, Dios sabrá cómo, sobre una cosa llamada "fenómenos de la mente". Pero, ¿Qué es eso? ¿Cómo se evalúa? Nunca entenderé los criterios ni los conocimientos que tienen las personas que realizan la labor Legislativa. Pero les puedo asegurar que ni los que participaron en la elaboración de dichas leyes ni los asesores tenían la más mínima idea de Psicología. Es como si me hubieran encargado a mí la elaboración de una Ley que regule la Pesca en las aguas territoriales de España. Muy bien, pero si yo no distingo un boquerón de una sardina... Si nunca he estado en un barco de pesca..., y, además, no sé nadar... Bonita Ley podría hacer. Y, claro, si además elijo de asesores a mi amigo Paco (que es carpintero) y a María (que trabaja en una Escuela Infantil). Y éstos, para más inri, se dejan influenciar por el Ministro de Pesca del Magreb (que tiene intereses contrapuestos a los de los pescadores españoles)... Puestas estas condiciones extremas, les aseguro dos cosas. La primera es que, por ridículo que parezca, el resultado Legislativo sobre la Psicología se ajusta totalmente a una labor hecha en condiciones similares. Y la segunda, que en las condiciones extremas y ridículas expuestas, mi Ley sobre la Pesca en España hubiera sido significativamente mejor que el resultado de las Legislaciones sobre Psicología. También me pregunto qué definición sobre la Salud tendría en mente el Legislador cuando dejó la carrera de psicología fuera de las Ciencias de la Salud. ¿Qué es la Salud? Según la OMS es un estado de bienestar físico, psicológico y social. ¿Qué parte de dicha definición no entendió el Legislador? Los psicólogos, trabajemos en el campo que sea de nuestra especialidad intervenimos, necesariamente sobre el ámbito de la salud psicológica y social de las personas. Además, como lo físico y lo mental está unido, muchas veces, con las intervenciones psicológicas mejoramos también la salud física. Este es el estado en que quedó la Psicología con la aprobación de la LOPS (Ley Orgánica de Profesiones Sanitarias, de 2003). Ahora veremos cómo se "apañó" el entuerto y el estado actual (de muerte cerebral o coma?) de la Psicología Española.  

Descripción de la Psicología en España tras la entrada en vigor de las Leyes que la regulan En la actualidad conviven en España 3 tipos diferentes de Psicólogos: Psicólogos Especialistas en Psicología Clínica; Psicólogos Generales Sanitarios y Licenciados o Graduados en Psicología. Cada una de estas figuras es el resultado de un itinerario de formación distinto. El primero, tras obtener el Grado en Psicología aprueba una oposición basada en un temario que no es más que un resumen de la carrera. A continuación entra en un Programa Teórico Práctico de 4 años de duración que se realiza en la Sanidad Pública. El segundo, tras graduarse, se matricula en un Master Oficial Universitario de 2 años de duración tras lo que obtiene el Título de Psicólogo General Sanitario y que le habilita para ejercer la Psicología en el ámbito privado pero no en la Sanidad Pública. Sin embargo, son considerados "Sanitarios". El Graduado en Psicología puede trabajar en su gabinete, que no es "Sanitario". No puede ejercer en "Centros Sanitarios" ya sean públicos o privados. Además, se realiza una diferenciación entre las funciones de cada una de estas figuras, que, en la práctica es difícil de aplicar (porque el legislador, al establecer dichas funciones lo ha hecho sin ninguna base en el conocimiento de las habilidades, funciones, currículum, etc. de los Psicólogos).

Problemas actuales de la Psicología en España y propuestas de solución 1. Denominación de las categorías de los Psicólogos. Con el Título de Psicólogo Especialista en Psicología Clínica se han cometido varios errores. La Psicología Clínica es un Area de Especialización dentro del campo de actuación de la Psicología, como se ha expuesto en párrafos anteriores. Es un Psicólogo Clínico todo aquel Psicólogo que se dedica a la evaluación, diagnóstico y tratamiento de personas que sufren trastornos psicológicos. No se puede reservar por Ley esta denominación internacional y propia de nuestra disciplina sólo a aquellos que han aprobado el PIR. Todo psicólogo que intervenga de cualquier forma o con cualquier técnica sobre personas que sufren un trastorno psicológico es un Psicólogo Clínico y se dedica al Area de la Psicología Clínica. La Psicología Clínica es ya una Especialidad dentro de la Psicología. No es correcto atribuirse una especialidad dentro de otra especialidad. Por más que les suba la autoestima a mis compañeros PIR, deberían conformarse y sentirse orgullosos de ser Psicólogos Clínicos. Por otro lado, en la Sanidad Pública se interviene también en el Area de la Psicología de la Salud, que es otra area de especialización dentro de la Psicología. Por tanto, la denominación correcta para este grupo de Psicólogos, por más que les pese, debería ser: Psicólogo Clínico y de la Salud. La denominación de Psicólogo General Sanitario es todavía más aberrante. Se ha querido asemejar la Psicología a la Medicina. Pero además, se ha hecho copiando una terminología que en la misma Medicina está hace muchos años desfasada. Esto es, antes existía en Medicina el Médico General y el Médico Especialista. De ahí la genial idea. Pero el término Psicólogo General no existe en nuestra disciplina. Además no tiene traducción al inglés. No es homologable en ningún país ni de Europa, ni de EEUU ni de ningún otro lugar. Por otro lado, el término Psicólogo Sanitario tampoco dispone de traducción ni homologación en otros países. Existe el Psicólogo de la Salud pero no el Psicólogo Sanitario. ¿Qué es un Psicólogo General Sanitario? Ninguno lo sabemos. Quizás se ha querido insinuar que los Psicólogos que no son PIRes, son "generalistas". Pero entonces para qué tenemos que hacer un Master Oficial de dos años de duración ¿para especializarnos o para seguir siendo más generalistas? Si esta denominación lleva a error al más curtido de los Psicólogos, imágínense la confusión que pueden crear en la Población General. Si en el S. XXI todavía la mayoría de las personas no distinguen lo que es y lo que hace un Psicólogo de un Psiquiatra ¿cómo van a distinguir esta denominación incomprensible? Cuando ponga en mi tarjeta de visita que soy Psicólogo General Sanitario, más de uno se creerá que trabajo en un hospital y vendrá esperando verme con la bata blanca y con la receta preparada. Considero que la denominación correcta para los Psicólogos que ejercemos en el ámbito privado debería ser Psicólogo Clínico o, simplemente, Psicólogo. 2. Funciones de los diferentes tipos de Psicólogos. Conforme a la Legislación actual las funciones de los 3 tipos de Psicólogos son totalmente diferentes. A los Psicólogos Especialistas en Psicología Clínica se les reserva la facultad de realizar evaluaciones psicológicas, diagnósticos y tratamientos psicológicos. Además, a ellos hay que derivar los casos más graves y que "superen" nuestras capacidades. Los Psicólogos Generales Sanitarios trabajarían en la "promoción de la salud". Pero, ¿Qué es la promoción de la salud? ¿Cómo se hace? ¿Cómo se diseña una intervención sin llegar a un diagnóstico de lo que le ocurre a la persona? Y ya, las funciones del simple Graduado en Psicología, ni se saben. Pienso que la tarea de regularización y de promover la mayor formación de los Psicólogos va en la dirección correcta. Incluso se debería ser más exigente con dicha formación. No obstante, los psicólogos, para ejercer nuestra función de mejorar la salud de las personas debemos poder trabajar con nuestras propias técnicas. La evaluación (conocer el problema de la persona), el diagnóstico (resumen de los resultados de la evaluación) y la intervención psicológica (conjunto de técnicas que se utilizan para que mejore el problema de la persona) es la única forma de realizar una terapia psicológica. Sin esas herramientas no se puede ayudar a las personas desde nuestra disciplina. Por tanto, las funciones de los Psicólogos Especialistas en Psicología Clínica y las de los Psicólogos Generales Sanitarios deberían ser exactamente las mismas. La única diferencia estaría en que los Psicólogos PIR podrían trabajar en la Sanidad Pública (que es en la que se han formado, con dinero público) y los Psicólogos Generales Sanitarios no. 3. La Psicología como Ciencia de la Salud. Gran parte del problema surge de la radical negativa a considerar la Psicología como Ciencia de la Salud. La definición de Salud de la OMS considera ésta como un estado de bienestar "físico, psicológico y social". Si la OMS considera la salud psicológica y social como dos de las tres áreas que conforman ese estado global de bienestar ¿Bajo qué criterio la Psicología no es una Ciencia de la Salud? ¿A qué se dedican los Psicólogos si no es a investigar y a intervenir para mejorar la salud de las personas? Esta cuestión no es baladí. De esta exclusión surgieron muchos de los problemas actuales. Por ejemplo, en Granada, desde hace años se está implantando el Campus de la Salud. Allí estarán los hospitales, las Facultades de Medicina, etc. Pero no la Facultad de Psicología. Sería beneficioso para todos que Psicólogos y Médicos se formasen juntos. Que los Psicólogos, al estar cerca de los hospitales pudieran realizar en ellos parte de su formación y prácticas. Que los investigadores, que a la hora de la verdad trabajan en colaboración en muchos ámbitos, por ejemplo adicciones, etc. pudieran tener sus despachos y sus laboratorios en un mismo entorno físico. La necesaria colaboración entre medicina y psicología sería mucho más fácil. Pero no. Parece que para los intereses de algunos hay que seguir excluyendo la Psicología del ámbito de las Ciencias de la Salud. 4. En la actualidad, la situación legal a la que se ha llegado es muy grave. La propuesta de crear el Master General Sanitario (realizada por nuestros Colegios Profesionales y los Decanos de las Facultades de Psicología de España) sólo ha estado motivada por sus propios intereses. Su único propósito parece que ha sido conseguir alumnos para las Facultades de Psicología, y supongo, que los Colegios Oficiales de Psicólogos perseguirían algún otro interés. No lo sé, y no voy a entrar en teorías conspiranoides. No obstante, el resultado al que se ha llegado con esa regulación, es indiscutible que genera muchos más problemas de los que resuelve, que perjudica gravemente a los Psicólogos y que perjudica la Salud de la población general. Es totalmente incomprensible que dicha propuesta haya surgido de los máximos representantes de la Psicología en España. El nombre de Psicólogo General Sanitario no existe en ningún lugar del mundo. Ni somos generales, ni somos sanitarios. Con la problemática actual de desempleo en España y su especial incidencia en los jóvenes, ahora, para acceder al trabajo, los Graduados en Psicología tendrán que esperar 2 años más. Con la situación de crisis y desigualdad económica, tendrán que dedicar aproximadamente 4.000€ a su formación. Con lo cual, los que no dispongan de dichos recursos se verán privados del acceo al mundo laboral.

¿Qué funciones tiene un Graduado en Psicología después de cursar el Master en Psicología General Sanitaria?
En la actualidad, se les está diciendo a los estudiantes de Psicología y a los nuevos Graduados y Licenciados que para ejercer la Psicología tienen que cursar, obligatoriamente el Master General Sanitario. Que la realización de dicho Master les permitirá ejercer la Psicología, y, que, por tanto, los demás Master de Psicología, no universitarios no sirven para nada. La verdad es que lo que no sirve para nada es el Master General Sanitario. Respecto a formación práctica y aplicada tiene las mismas carencias de falta de enfoque práctico-aplicada que el Grado en Psicología. Está impartido por los mismos profesores. Quien haya cursado la carrera de Psicología sabrá a lo que me estoy refiriendo. ¿Te van a enseñar esos profesores en 2 aplos lo que no te han enseñado en 4? En realidad sólo sirve para una cosa, para inscribirse como Psicólogo en el Reistro Sanitario. Pero, con qué funciones? Con las mismas que si no se hubiera cursado dicho Master. Se podrá evaluar pero no realizar diagnóstico, tratamiento psicológico (aplicar las técnicas de modificación de conducta), ni intervenir sobre trastornos psicológicos. Si llega alguien con un trastorno (difícil de saber si no se puede hacer un diagnóstico) habrá que derivarlo al Psicólogo Especialista en Psicología Clínica. Sólo podrá "promover la salud de sus clientes" (y ni se sabe cómo). ¿Para eso hacemos un Máster y le dedicamos esfuerzo, tiempo y dinero? ¿Para tener menos funciones que un "Coach" e incluso menos que un vidente?

La Propuesta
Pienso que si todos los Psicólogos nos unimos en una lucha común con el objetivo de promover una Psicología que promueva la Salud Psicológica de las personas con las técnicas que hemos estudiado, nos negamos a cursar dicho Máster y dedicamos nuestro esfuerzo y dinero a defender nuestra profesión y el derecho de los ciudadanos a recibir una intervención psicológica eficaz podemos cambiar estas nefastas legislaciones y conseguir una regulación razonable y beneficiosa para todos. Para esa lucha podemos organizarnos a través de la AEPAP (Asociación Española para el Avance de la Psicología) dado que nuestros representantes legales han demostrado no representarnos ni a nosotros ni a la población que atendemos.

Antonio Luis Maldonado Cervera
Presidente AEPAP